EL agua NO ENGORDA.
Tiene CERO calorías.
NUNCA se convierte en grasa.
En personas sanas, hay circunstancias en que puede RETENERSE : comidas saladas o muy condimentadas, ingesta de alcohol, algunos medicamentos de uso frecuente como antiinflamatorios-analgésicos , síndrome premenstrual en las mujeres.
En estos casos, el organismo retiene el agua y puede CONFUNDIR con aumento de peso.
El agua NO adelgaza.
Aunque se beba en ayunas, tibia o entre comidas, NO adelgaza.
El consumo aconsejable de agua es 1,5 l. diarios.
En casos de temperaturas elevadas ("ola de calor") o sudoración intensa, las necesidades de agua se elevan hasta los 3 o 4 l (incluso si la persona no tiene SED).
También es lo primero que hay que reponer en casos de gastroenteritis.
Con excepción del ACEITE, que es grasa en estado puro, todo lo que comemos contiene agua. En la lechuga, endivia o espárragos supone un 95% de su peso.
Aunque el agua ni engorda ni adelgaza, es IMPRESCINDIBLE para la vida humana.
En un adulto, el agua representa el 65% del peso corporal.
Privados de agua, podemos vivir 5-6 días. Por eso, en casos de catástrofes, es tan importante la búsqueda y rescate de supervivientes dentro de este periodo.
El cuerpo pierde agua a través de los excrementos, la transpiración y del vapor de agua en nuestro aliento, en función del grado de actividad, temperatura, humedad u otros factores.
La reponemos bebiendo o como agua presente en los alimentos.
Cuando nuestro organismo necesita mas agua de la que le damos, se pone en marcha el mecanismo de la SED.
La SED se desencadena por una pérdida de líquidos (sudor extremo, diarrea) o por un aumento de la concentración de sales minerales (el caso más común, una comida salada).
Mantener el EQUILIBRIO agua-sales minerales es fundamental para el organismo.
Aunque el agua NI ENGORDA, NI ADELGAZA.
Publicado con Blogsy
No hay comentarios:
Publicar un comentario