14 de junio de 2015

COMER SEMILLAS: UN TRATAMIENTO ANTIEDAD.

Siete meses después de escribir este artículo lo reviso y empiezo por el final: los resultados.
Durante este tiempo he comido semillas a diario. Las primeras semanas por convicción después de documentarme para escribir el post.
A partir de de las 7-8 semanas, aproximadamente, noté los primeros cambios en la piel. Si recordamos que el ciclo de la epidermis (capa más superficial de la piel) es de 45 días, este es el tiempo que los nutrientes de las semillas necesitaron para incorporarse a la creación de células epidérmicas nuevas.
Los RESULTADOS: la piel es más firme, suave, elástica y luminosa. Una piel más joven. Un TRATAMIENTO ANTIEDAD.
A partir de los 2 meses, esta mejoría va en aumento. Ahora que llevo 7 meses, ha superado todas mis espectativas. Para tener los mejores resultados, hay que perseverar, como siempre.
Hay una relación directa entre la mejoría de la piel y la toma diaria de semillas. Por extensión, los nutrientes que aportan se han debido incorporar al resto de tejidos y órganos y a todos los procesos bioquímicos del cuerpo.
La demostración de esto, con análisis para determinar niveles de vitaminas, minerales, antioxidantes y ácidos grasos esenciales entre otros parámetros, puede ser un buen tema de estudio.
Y a continuación, sigue el post, por si os animais a COMER SEMILLAS.

Comer SEMILLAS está de moda.
Desde el punto de vista nutritivo las semillas son tan interesantes que escribo este post para convenceros que deben incorporarse a nuestra dieta diaria. Que han llegado para quedarse.
Después de 2 meses de tomarlas, hablo con información y desde la experiencia propia.
La mezcla que os propongo contiene CHIA, SÉSAMO TOSTADO, LINO, PIPAS DE GIRASOL, PIPAS DE CALABAZA, AMAPOLA y CÁÑAMO.


Todas las semillas tienen en común las siguientes propiedades:
-gran contenido de PROTEINAS vegetales de alto valor biológico (contienen aminoácidos esenciales).
-gran contenido de ácidos grasos esenciales OMEGA 3 y OMEGA 6.
-gran contenido en FIBRA.
-VITAMINAS: A, C, E y del GRUPO B.
-MINERALES: calcio, magnesio, hierro, fósforo, potasio. También selenio, un mineral que nuestro organismo necesita en pequeñísimas cantidades (minerales traza, como el hierro), y que pocos alimentos lo contienen.

Sin entrar al detalle de la composición, un CONCEPTO: la semilla contiene todos los nutrientes necesarios para el desarrollo del embrión de la planta.
Dicho esto, el VALOR NUTRITIVO de las semillas es indiscutible.
Se comportan como REGULADORES del metabolismo, ya que, de una u otra manera, intervienen en todos los procesos biológicos del organismo: síntesis đe moléculas y reparación celular.
Gracias a la FIBRA tienen un efecto saciante, laxante y modulador de los niveles de grasa en sangre (colesterol y triglicéridos).
Más interesante todavía es su actividad ANTIOXIDANTE y ANTIINFLAMATORIA, que las hace indicadas en todas las enfermedades autoinmunes y en la prevención del envejecimiento.

¿Cómo incorporarlas a nuestra alimentación?
Para beneficiarse de sus efectos, su CONSUMO debe ser DIARIO y por largo tiempo, o tiempo indefinido.
Para garantizar la ABSORCIÓN es aconsejable TRITURAR las semillas. Algunas (el sésamo entre ellas) tienen una cubierta protectora resistente a los ácidos gástricos: si no se mastican muy bien aparecen intactas en las heces.
Triturar las semillas con un molinillo o similar, hasta conseguir una mezcla homogénea, del tamaño aproximado de cabezas de alfiler.

GUARDAR en el congelador, en recipiente opaco y cerrado, para evitar que se oxiden y pierdan valor nutritivo (las semillas NO se congelan, ya que contienen poca agua y muchas grasas).
CANTIDAD: 2 cucharadas soperas/ día de la mezcla. Añadidas a un puré, en la ensalada, con leche, yogur, zumo...incluso con un poco de agua.
Tienen un sabor dulce muy suave que recuerdas a las pipas.

Los efectos más inmediatos se ven en las heces: debido a la gran cantidad de FIBRA, estas son voluminosas. De aquí su indicación en el ESTREÑIMIENTO.
Los cambios en la textura de la PIEL se aprecian a partir de los 2 meses: piel más suave, hidratada y firme.
Algunas personas aprecian mejoría del SUEÑO. Esto se debe a las semillas de amapola, que tiene una actividad de relajante nervioso.
A los pacientes que me refieren ANSIEDAD POR COMER, les aconsejo que no trituren las semillas: que pongan la ración de semillas enteras y las mastiquen muy bien. En la mayor parte de los casos los resultados son buenos y consiguen frenar el impulso de comer lo que no deben.

Por todo lo dicho, creo que incorporar semillas a la dieta diaria es MÁS QUE UNA MODA.


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